El verano va tocando a su fin, pero en Galicia la cantidad de fiestas populares, romerías y citas gastronómicas no decrece en la recta final del estío.
A lo largo de la segunda quincena de agosto y también de comienzos de septiembre puedes acudir a numerosos eventos de interés en los que disfrutar de los últimos rayos de sol veraniegos acompañados de comida, verbenas, espectáculos temáticos o un buen vino.
A continuación, recopilamos algunas de las fiestas y romerías a las que puedes acudir al final del verano.
Fiestas de Melide: Desde el pasado día 12 al 20 Melide acoge una semana completa dedicada a la romeria de San Roque, que incluye mercado medieval peregrino, programación cultural, actuaciones musicales y orquestas.
Festa do Mar en Combarro: Ubicado en el concello de Poio, este precioso pueblo acoge una fiesta cuyo principal atractivo es la degustación de productos procedentes del mar, junto a espectáculos musicales y otras tradiciones. Se celebra los días 24 y 28.
Romería do Naseiro: Entre los días 25 y 29 de agosto tiene lugar en Viveiro esta tradicional cita también denominada Romaría do Bó Xantar por su riqueza gastronómica, en la que cada día se degusta un producto como el pulpo o la empanada. Numerosas verbenas y atracciones amenizan las veladas, que despiden agosto con un gran ambiente familiar y festivo en las inmediaciones de esta ciudad de la costa lucense.
Festa da Historia en Ribadavia: Tiene lugar el día 25 y te apasionará si te gusta disfrazarte para sumergirte en el universo medieval, poblado de bodas, cenas y bailes, entre otros espectáculos. Hay juegos populares y pueden reservarse cenas para degustar queso, pulpo o empanada.
Feira Franca en Pontevedra: Junto con Peñas y la Peregrina, es uno de los eventos más importantes en la localidad a lo largo del año y considerada de interés turístico a nivel gallego. Se celebra los días 1 y 2 de septiembre y rememora el privilegio concedido por el rey Enrique IV en el año 1.467, en virtud del que se autorizaba la celebración de un mercado libre de impuestos de un mes de duración, quince días antes y quince días después del 24 de agosto, festividad de San Bartolomé. Se trata de un hermoso y concurrido mercado medieval donde tienen presencia la artesanía, la gastronomía o los torneos caballerescos, además de recrear el transporte del vino o contar con un completo programa cultural.
